Consejos obvios para ahorrar combustible en un camión

Al momento de tener un camión para el transporte de mercancías, bien porque se ha adquirido (de contado, con financiación) o bien porque se está alquilando para el trabajo, lo primordial es ahorrar gastos.

Y sin lugar a dudas, el mayor gasto de un camión es el combustible que utiliza, puesto que es el que más se tiene que ir recargando conforme se conduce. Por eso, ahorrar combustible será algo determinante para las ganancias del trabajo.

La obviedad

Cuando hablamos de consejos para ahorrar combustible, muchas personas pensarán en sistemas de desconexión de la transmisión para aprovechar la inercia en pendientes hacia abajo, en trucos como el platooning, entre otros tantos que circulan por internet y que se han convertido en referencia para muchos conductores.

El problema en esos casos es la dificultad de la implementación. Si la solución es mecánica, como el caso de los sistemas que se adaptan a transmisión, motor y demás, es un gasto adicional que hay que tener en cuenta. Si la solución es sobre el método de trabajo, como el platooning, hay que ensayarlo y tener presente que en ese caso específico, siempre se debería circular en compañía de otro camión.

Entonces, se olvida lo obvio. Hay consejos obvios que fácilmente se olvidan y que pueden ser tanto o mucho más eficaces para ahorrar combustible en un camión. De ellos hablaremos hoy.

El mantenimiento lo es todo

Todo mantenimiento correctamente hecho a un camión incidirá en ahorro de combustible. Es una situación invariable.

Porque, al final, todo lo que oponga algún tipo de resistencia (incluso, la pérdida de rendimiento puede categorizarse así) estará repercutiendo en el consumo de combustible. De tal manera que si se resuelven los problemas que causan dicha resistencia, se estará ahorrando.

Tal vez el punto más interesante está en los neumáticos. Los neumáticos representan la mitad (o más) del consumo de combustible de un camión. Esto, por la resistencia entre las ruedas y el rodamiento. Mientras menos resistencia se tenga, mayor será el ahorro de combustible. Y sí, los neumáticos más baratos del mercado suelen tener resistencias muy elevadas, por lo tanto, lo que se ahorra en el gasto de los neumáticos se pagará 2 o 3 veces en concepto de gasolina o diésel.

La forma de conducir

Todos sabemos que los camiones más pequeños del mercado (digamos, 2 ejes, con cabina compacta) pueden fácilmente llegar a tener 200 caballos de fuerza o hasta más. Todos reconocemos su poder.

Ni qué decir luego de las cabezas tractoras, cuya potencia también es respetable.

Muchas veces, se abusa de esta característica que siempre será positiva, dando acelerones y frenazos sin piedad. Ambas cuestiones representan hasta un 50% de aumento de consumo de combustible con respecto a la conducción normal o a velocidad uniforme.

Es por eso, por ejemplo, que siempre será más rentable recorrer grandes distancias por autopistas.

Esto tiene que ver con la marcha que se utiliza. Los camiones en velocidades bajas o las primeras marchas, consumen mucho combustible. Aparte, si constantemente se tiene que estar cambiando entre ellas (de primera a segunda, de segunda a tercera, y de vuelta), el consumo será exorbitante en comparación con ir a una velocidad estable, digamos, en cuarta o hasta quinta.

Eso por un lado. Utilizar maniobras suaves y aprovechar inteligentemente la inercia (sobre todo en pendientes livianas) puede ser también algo de cuidado, sobre todo si se tienen neumáticos con baja resistencia a la rodadura, donde el ahorro puede ser sustancioso.

La capacidad de carga

Aunque dependerá de cada camión, de cada tipo de cabina o plataforma de carga, todos tienen una MMA asociada. Todo lo que sobrepase ese límite, no sólo invita a que aparezca una multa, sino que también implica un gasto exagerado de combustible, porque el vehículo estará sobretrabajando.

Pero no es así únicamente con ese límite, sino también con el peso en general. Por eso, la carga siempre debe distribuirse uniformemente por toda la superficie útil para su transporte (generará menor resistencia), y desde luego, nunca se debería ocupar más de lo que indica el fabricante.

Con esos consejos obvios a punto, seguramente el ahorro de combustible será notorio. Por supuesto, siempre todo dependerá del tipo de camión y de la forma de trabajo. También de la calidad de algunas piezas del motor y demás. Y claro, obviamente, el mayor ahorro de combustible para un conductor se da cuando no hay retornos vacíos.