Sean digitales o analógicos, los tacógrafos parten de una base misma de funcionamiento. Se trata de un aparato de control que se instala en los vehículos, siendo obligatorio en aquellos que superen las 3,5 toneladas o que tengan capacidad para transportar 9 o más pasajeros (conductor incluido).
En el caso particular de los tacógrafos digitales, que son los más utilizados, están compuestos por 2 partes, un sistema de gestión que está dentro del vehículo y sensor, ubicado en la caja de cambios.
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¿Qué función cumple?
En España, el uso del tacógrafo en el sector del transporte de mercancías y se pasajeros tiene mucho que ver con el cumplimiento del Reglamento (CE) 561/2006, referente a los tiempos de conducción y de descanso, siendo una legislación importante en materia de prevención de accidentes.
Pero el tacógrafo tiene utilidades de seguridad, de control y de cumplimiento de la ley que van más allá de eso.
Para utilizarlo, el conductor debe insertar su tarjeta de transporte en una de las 2 ranuras (disponen de 2, por si hay dos conductores), justo antes de comenzar la jornada laboral. A partir de allí, y dependiendo de la actividad escogida, el tacógrafo comenzará a monitorizar distancia recorrida, tiempo de conducción, velocidad de los trayectos, movimientos bruscos, horas de trabajo totales y horas de descanso.
Esa información luego puede ser cotejada con la impresión de la información que almacena, que suele ser de hasta 28 días de antigüedad. Para eso, se utilizan las tarjetas de empresa, de control de organismos de seguridad o tarjetas de taller, utilizadas para su calibración y mantenimiento.
¿Cuál es su importancia?
La Comisión Europea para la Movilidad y el Transporte dictaminó en estudios de años anteriores que el 20% de los accidentes entre vehículos de carga o de transporte pesado estaban directamente vinculados con la falta de horas de descanso de sus transportistas. Es decir, que el simple hecho de su utilización ya estaría relacionado con la prevención de accidentes de tráfico, una de las prioridades del sector del transporte de mercancías por carretera.
¿Hay multas por no usar un tacógrafo?
Si el vehículo utilizado consta de un tacógrafo analógico que funciona bien, no es obligatorio reemplazarlo a menos que así lo quiera. Entre tanto, si no se usa el tacógrafo o si se utiliza mal, las multas van desde los 2.000€ hasta los 4.000€.
Sin embargo, las multas más comunes están asociadas con la falta de horas de descanso (desde 200€ hasta 2.000€) y el exceso de horas de trabajo (desde 100€ hasta 2.000€).