No todas las cooperativas de transporte de mercancías compiten al mismo nivel. O como suele decirse, no todas juegan en la misma liga.Algunas, por su historia, por el rubro en el que se han especializado, por la cantidad de socios o por ser una bandera de una región en particular, parecen estar con el éxito asegurado.
Y el éxito, a veces, se mide bastante bien por dos cosas en particular: las rutas cubiertas y la intermodalidad, sobre todo en estos días donde el comercio electrónico, la dinamización de los servicios logísticos y la brevedad en el aporte de soluciones son la norma.
Rutas cubiertas: más y mejor
Por norma general, y esto viendo desde una perspectiva de los clientes (que al final son los que terminan eligiendo nuestros servicios), mientras más rutas tenga cubiertas una cooperativa de transporte de mercancías, mejor debe ser en general su servicio y mayor su éxito. Es una conclusión fácil de sacar y por esa razón los clientes lo piensan de esa manera.
Si bien es cierto que hay cooperativas de transporte que se han forjado un nombre y una reputación en una Comunidad Autónoma en particular, aquellas que han labrado una gestión eficaz en diferentes regiones del país o del mundo siempre serán las más conocidas y las que mejor reputación tengan, al menos, de nuevo, a juicio de los potenciales clientes y socios.
La intermodalidad como indicador de éxito
Aquí volvemos a entrar en terrenos de opinión desde la perspectiva de los usuarios. No necesariamente una cooperativa de transportes que tenga servicios por mar, por tierra, por vías férreas y por aire será mejor, más segura o más competitiva que una que sólo haga transportes por carretera.
Pero, la intermodalidad es una de las mejores formas de garantizar mayor competitividad en el mercado, porque las embarcaciones pueden transportar hasta 100 veces más carga que el mejor camión de otra cooperativa, y porque un transporte aéreo puede llegar hasta 100 veces más rápido que una embarcación al mismo destino.
La intermodalidad permite equilibrar costes, tiempos de entrega, capacidad de carga, brindando soluciones integrales y más específicas a cada cliente en particular, al tiempo que como se decía antes, las cooperativas se permiten competir con actores logísticos más poderosos y con mayores capacidades de operatividad.
No obstante, no dejan de ser cuestiones subjetivas al momento de hacerse una opinión validera sobre los servicios.