Cosas a tener en cuenta al transportar mercancías peligrosas

El transporte de mercancías por carretera es una labor que con el tiempo puede automatizarse en ciertos procesos, mientras que los transportistas con mayor experiencia podrán hacer las cosas casi que instintivamente.

Y es que es relativamente sencillo determinar la mejor forma de embalar, transportar, cargar y descargar el mayor porcentaje de mercancías que diariamente se trasladan por parte de nuestros servicios. Pero en algunos casos la situación cambia completamente, como podría ser el puntual de las mercancías peligrosas.

Una situación particular

Porque para nadie puede ser un secreto que transportar mobiliario o artículos de plástico (como juguetes) amerita únicamente asegurar contra caídas, buscar cajas de determinado tamaño o directamente palets compatibles con la carga. Poco más.

La situación cambia cuando se tienen que trasladar mercancías peligrosas, primero que nada porque entra en consideración el riesgo de los transportistas y de todos los que manipulen la mercancía para garantizar su envío.

Breve repaso sobre las mercancías peligrosas

Ya en otros posts hemos hecho un contenido más extenso sobre las mercancías peligrosas, que en resumen, hacen referencia a explosivos, gases, líquidos inflamables y un sinfín de materiales que pueden ser desechos industriales o hasta productos de uso diario que resultan volátiles ante situaciones específicas de temperatura, humedad o movimiento.

Por tanto, cada mercancía peligrosa en su tipo tiene diferentes modos de transporte seguro, que debe ser lo más importante en esta clase de servicios.

¿Qué se debe tener en cuenta?

Lo primordial al trabajar con mercancías peligrosas es utilizar el embalaje adecuado.

De hecho, no sólo es lo primordial, sino que es lo más importante, porque como se decía antes, mucho de lo bien y seguro que se preste este servicio dependerá de lo bien asegurada que esté la mercancía para no ocasionar ningún problema durante su traslado en lo relacionado a la exposición a movimientos, temperatura o condiciones de humedad. Claro está, dependerá de cada producto.

Luego está el tema de la información y el conocimiento por parte de todas las personas involucradas en la prestación de servicios. Para fines didácticos, el correcto etiquetado.

Las etiquetas, además de las informativas sobre descripciones y envíos, deben estar presentes sobre todo las que tienen que ver con pegatinas que los organismos obligan al momento de trabajar con esta clase de mercancías,puesto que hay diversas categorías y cada una amerita de un tratamiento distinto, también para la legislación y las etiquetas correctas a utilizar.

Es conveniente decir allí que si no están presentes las etiquetas, es posible afrontar multas.

Finalmente, contar con un buen seguro de mercancías es lo más inteligente. Ya no opcional, sino obligatorio y sin ningún tipo de excepción, los seguros de mercancías peligrosas brindan un respaldo adicional con respecto al trabajo que se llevará a cabo.

En otras interesantes ideas, la planificación de la ruta y la preparación del envío serán fundamentales, puesto que lo ideal es transportar esta clase de mercancías por sitios donde no haya tanto tránsito y donde no se sometan a demasiados movimientos.